obsesionadas) fangirls adolescentes.
¿Qué hace que el Crepúsculo libros (y ahora la película) trascendental es la resonancia emocional detrás de los personajes. Claro, el libro es empalagosamente romántico, demasiado melodramático y, en ocasiones, minuciosamente lento. Y sí, la película tiene demasiados momentos de mirarse a los ojos y escuchar música emo de fondo. Pero a pesar del cieno, a los amantes del amor les resultará difícil cerrar el libro o ver los créditos sin sentir una oleada de emoción tan fuerte que jurarás que el mismo Edward está bailando en tu corazón. Placer culposo o no, es Titánico para los tipos hipster torturados y en esa capacidad, funciona.
Catalina Hardwicke (Trece) fue una buena elección para la película, ya que ha demostrado que comprende y no menospreciará la confusión y la angustia asociadas con la adolescencia. Como fanática de la serie, también se aseguró de mantenerse fiel al libro, sin dejar ningún detalle importante sin resolver. A diferencia de muchas adaptaciones, la falla aquí no está en lo que falta sino en algunas de las adiciones. Hay demasiadas escenas sin diálogos con los amantes acostados o corriendo juntos por el bosque, varias secuencias de flashback cursis y un acortamiento decepcionante de la escapada de Bella de Alice y Jasper que inevitablemente cambia la escena muy nerviosa y acelera el final. Dicho esto, Hardwicke infunde irónicamente una ligereza muy necesaria en varias escenas de la película, en particular una secuencia en Port Washington donde Edward revela que puede leerle la mente a Bella y luego procede a demostrar su habilidad sacando a relucir sin humor los pensamientos de los demás patrocinadores. en un restaurante (渟ex, dinero, sexo,ats.?
Es posible que la película no gane nuevos fanáticos para la serie, aunque el rumor que la rodea ciertamente podría hacerlo. Pero para los críticos que realmente importan, los verdaderos Twihards, seguramente habrá pocas quejas. Tal vez un poco sobreactuado y con una pizca de efectos especiales cursis (el presupuesto de $37 millones seguramente no ayudó en ese departamento), pero en general una transferencia fiel y desgarradora de la historia de amor para una nueva generación de marginados. ¿Y no se lo merecen?